apuntes sobre la decadencia social

Existen en nuestra actualidad muchas mentalidades que no aprueban el avance sino que se conforman con la negligencia del saber y del actuar, vale decir que la decadencia en una sociedad se percibe al menos en tres aspectos: medioambiental, social y cultural. El colapso medioambiental se produce cuando sucede un evento natural que afecta el desenvolvimiento de los seres humanos, cuando las condiciones para los seres vivos (plantas-animales-humanos) convergen en el caos debido a la alteración del ecosistema. El colapso medioambiental es una condición caótica que no depende del actuar de los seres humanos, sino de agentes naturales (aunque no se descarta que un porcentaje de esos desastres naturales sean ocasionados por excesos de la labor humana) El colapso social se suscita cuando a la palabra respeto se extingue, entendiendo respeto como aquella disposición a la consideración que alguien o incluso algo tiene un valor por sí mismo y se establece como reciprocidad: respeto mutuo, reconocimiento mutuo. Respeto es un pensamiento-acción extinto de nuestra sociedad del siglo XXI, por lo menos a nivel occidental; extinto en pensamiento porque existen evidencias respeto por lo menos mientras existan sociedades clasistas y racistas, extinto en obra ya que muy pero muy pocas personas actúan en consideración a los demás. El colapso cultural es aquel sistema de decadencia que se inserta en la forma de ser de las personas y que borra sus consideraciones propias o locales por otras más básicas pero más extendidas. El gran monstruo cultural del siglo XXI se llama "absolutismo mercantil" en donde todo lo que se consideraba valioso en el pasado tal como: la brisa de la playa, las conversaciones con los amigos, los cantos tradicionales... han sido intercambiados por: oficinas y computadoras, teléfonos celulares y música pop en inglés. El absolutismo mercantil, es aquella doctrina invisible y muy tenaz que ha sido capaz de convertir cualquier cosa en un bien de consumo transado mercantilmente. Por último existen dos detonantes ulteriores de colapso social: el olvido histórico y la megasexualidad. Ambos detonantes atacan directamente lo último que sostiene a cualquier pueblo, atacan su memoria y su moral. Al desmemoriar a los pueblos, se repiten errores y se considera cada cosa como nueva sin hacer recuerdo de los precursores, por otro lado la megasexualidad ataca cada fibra moral de sus víctimas; ya no queda inocencia ni edades por etapas, no hay noviazgo juvenil, no hay matrimonios sin peligros en torno a la fidelidad, la pornografía a borrado el pudor y la creatividad sensual a cambio de meros ejercicios de miembros sexuales corporales (entre otros males colaterales que esto causa). Aquí dejo una lista de 10 sociedades que en el pasado colapsaron: .-Antiguo Egipto .-Antigua Babilonia .-Antiguo Levante .-Grecia clásica .-Imperio Romano .-Civilizaciones modernas del noreste de Asia, Hindú y Mogol India .-Chin, Song, Mongol y Manchú China .-Shogunato Tokugawa de Japón .-Aztecas .-Incas Y sin ánimo de ser profeta del mal, según las consideraciones anteriores, anotaré 3 sociedades que por sus características están destinadas al colapso a menos que cambien dramáticamente sus condiciones: .- Las costas del mundo, ya que el recalentamiento global sin duda alguna cobrará terreno, sin perdonar inclusive a las llamadas grandes ciudades, llamadas a contener la fuerza de sus mares y océanos heridos por la acción industrial humana. .- La pobreza extrema de la África negra y el Asia del sur: o se suscita el milagro de la distribución correcta de sus bienes o tendremos un colapso de sus estructuras en el corto plazo. .- La cultura de la vaciedad norteamericana que ha invadido de música y cine sin sentido a una sociedad global, que junto al consumo de drogas y la pornografía están a punto de propagar a manera de epidemia mundial los atentados con pistolas en colegios, los suicidios, el aburrimiento, las violaciones. El neo-nihilismo donde todo sirve para nada o por lo menos para hacer un negocio. Preguntas de interés: ¿Por qué los países del norte son más ricos que los del sur? ¿Es justo que con el nivel dialéctico de XXI siglos de historia humana todavía existan guerras? ¿Hasta qué punto seguiremos explotando a mujeres y niños? ¿El sistema capitalista e imperialista es compatible con la naturaleza del planeta tierra? ¿La inteligencia humana crecerá o disminuirá? ¿seremos más, o menos inteligentes en futuro? Libros propios para buscar y leer sobre lo expuesto: Homer-Dixon, Thomas. (2006). The Upside of Down: Catastrophe, Creativity, and the Renewal of Civilization. Washington DC: Island Press. Diamond, Jared M. (2005).|Collapse: How Societies Choose to Fail or Succeed. New York: Viking Books. ISBN 0-14-303655-6.

fábrica de ideas

"Una palabra nueva es como una semilla fresca que se arroja al terreno de la discusión" eso nos lo enseñó Wittgenstein, y dado el imperativo actual y eterno de la filosofía en pro de crear nuevas y mejores realidades, pretendemos hacer una lista de 9 pensamientos que se debemos hacer realidad, si es posible hoy mismo al terminar de leer este corto post: 1.- la propiedad privada vista como propiedad necesaria no como acumulación de bienes geo-espaciales. 2.- el agua debe llegar a todos de manera gratis, lo mismo que los alimentos necesarios para vivir. 3.- la educación no es un bien de consumo, es una vocación, no se calcula en tiempos para llegar a una graduación sino en ser sabios en el camino de la vida. 4.- el trabajo debe ser tomado como honra y no como herramienta de esclavitud, el trabajo es igual a su paga, llegará un día en que trabajemos en lo personal nos acoplamos a lo comunitario, sin necesidad de trabajar para otros a cambio de esclavitud. 5.- la felicidad es la serenidad interior, no es la fama ni la vida de las estrellas de cine o de la música. 6.- la mejor comunicación es la personal. 7.- escuchar al prójimo y verlo es reconocer su existencia. 8.- la vida es una y hay que buscar ser feliz, felicidad como principal valor de vida. Ver nº 5. 9.- pensar es y será siempre gratis, no hay que dejar de hacerlo.

barreras invisibles-visibles

“La humanidad saltará del reino de la necesidad al reino de la libertad”. F. Engels. Por medio de muchas barreras la mayoría poblacional (aquella que no posee inmensas riquezas sino que trabaja día a día por "vivir bien") es sometida a diferentes pruebas que quienes las superan, entran en el rango del heroísmo, de manera tal, que las barreras las podemos enumerar, estas son las pruebas a superar por los ciudadanos del siglo XXI: 1.- la no-realidad de los medios de comunicación: "Los moralistas quieren, ante todo, que la historia los deje en paz; con sus libritos, sus revistillas, sus suscriptores, el sentido común y las normas morales. Pero la historia no los deja en paz.”León Trotsky; los medios de comunicación no nos presentan la verdadera realidad, sino que nos fabrican un fenómeno realista que nos sumerge en una doble realidad: la realidad de la superación de pueblos por medio de su autodeterminación, la bondad de personas que por es callada por los asesinatos, huracanes, datos de la bolsa de valores y los programas sobre extraterrestres. 2.- la victoria de la dictadura mercantil sobre la libertad humana: Jean F. Brient nos conceptualizó el totalitarismo mercantil como " la colonización de todos los aspectos de la vida social e íntima y también de la totalidad del espacio por parte de la mercancía", lo que nos explica que nos han obligado a pagar "casi hasta por respirar", se han diseñado ciudades enteras donde todo esta preparado para que se gaste dinero, y que no haya espacios donde circular sin la necesidad de pagar por algún servicio, por lo menos antes el esclavo recibía casa y comida de sus amos, ahora los amos le cobran a sus esclavos el derecho de comer y de alojamiento, le imponen forma de vestirse, le imponen lecturas, y así, todo a la medida de gastar lo poco que se cobra por trabajo. 3.- La paulatina muerte de las ideas por los tecnicismos: se ha intentado "matar" los estudios sobre las ideas, las letras, el arte; por carreras técnicas que sólo reanudan el círculo esclavizante, ya existen carreras que no lanzan a vuelo a la mente humana, sino que la someten a mecanicismos reproductivos de pobreza alienante. 4.- La cultura del espectáculo le ha robado la imaginación a los humanos: una frase de Guy Debord nos dice que: "Todo lo que una vez fue vivido directamente se ha convertido en una mera representación” (del libro la cultura del espectáculo), se ha perdido la capacidad de aventura a cambio de un programa de tv donde un señor se lanza sobre cocodrilos, el erotismo lo han comercializado como pornografía, la adrenalina se vende consigue con la expectación de partidos de futbol en televisoras por cable o satelital cada domingo. Nos han vendido la idea romana reformulada de "pan y circo" como "televisión y comunicación", la era del celular ha empobrecido la comunicación persona a persona, la era del internet ha vaciado las bibliotecas, la era los reality show ha estupidizado a miles que creen que son vidas reales. Necesitamos abrir paso en medio de estas barreras visibles que nos nublan el libre derecho de pensar desde la autodeterminación, necesario es hacer pensamiento cambiante y efectivo.

la alteridad del respeto

Las naciones unidas en una de sus estadísticas más recientes, ha señalado que entre la relación de ricos y pobres surge por lo menos una premisa de separación: los pobres no se entienden como diferentes con respectos a los ricos (mucho menos al contrario) lo único que acota la estadística es que lo único que detesta el pobre del rico: es la mirada de desprecio que tiene el rico sobre el pobre. La alteridad en la filosofía de Hegel se concibe como «lo otro», un lugar destacado, y hasta necesario, en la constitución del sentido (y de la realidad) de las cosas. Todo es lo que es, pero la comprensión de lo que algo es depende de comprender lo que no es, porque nada «es» simplemente; todo se relaciona -dialécticamente- con todo. Lo finito no es sólo un límite cuantitativo; es la negación de todas las otras cosas que puede ser: no ser (cualitativamente) estas otras cosas es su sentido. Entre las cosas que para ser plenamente necesitan del «otro» está en particular el «yo». De ese modo, la alteridad es la posición personal de representación vital sobre las representaciones de los otros. En primer plano, la constitución de la existencia propia; en segundo lugar la existencia de los demás con respecto a la mía, con respecto a la de ellos. El punto de unión entre ambas existencias se entiende desde el respeto, mi existencia en relación sobre la naturaleza se basa en el "respeto", mi existencia con respecto a otra persona se basa en el respeto, en la aceptación mutua de las personas en torno a un mundo común. La existencia personal no es absoluta, sino relacional, no se basa en criterios personales sino en calidad de respeto mutuo entre el "yo" y "lo otro".

narciso y fraterno (perfiles antropológicos)

Dos razas coexisten en nuestra sociedad occidental, la raza "narciso" y la raza de "fraterno", la primera proviene del personaje mitológico griego que poseyendo tanta belleza se amaba a sí mismo, y de su erotismo surgió una gama de hijos tan grande que hoy componen gran parte del mundo que conocemos. La segunda raza es la de fraterno, quien siendo hermano, conserva el valor más nuclear de la humanidad, el calor del abrazo humano y de la sencillez del momento cotidiano. Sus interacciones confluyen en el mundo de forma muy desigual, mientras que el fraterno basa su vida en la herencia histórica de la bondad, se afirma en el amor a Dios y a su patria en tanto espacio concreto para la realización del progreso ético por medio de las acciones socio-productivas. En paralelo, encontramos a "narciso" quien ostentando la seguridad su belleza, muchas veces producto de cirugías estéticas, determina sus acciones en el progreso y la efectividad, tienen mentalidad de "manager", creen profundamente en el trabajo en equipo, con la connotación de lograr el éxito individual derivado del servilismo contractual. Poseen ambos perfiles, dos valores contrapuestos: el narciso es individualista mientras que el fraterno busca el bien común. El individualista-narciso busca al menos dos metas básicas en su vida: el placer y la fama, mientras que el benevolente-fraterno se concentra en: el bienestar y la tranquilidad. Por lo tanto, «El individualismo es una expresión reciente engendrada por una idea nueva. Nuestros padres no conocían más que el egoísmo. El egoísmo es un amor apasionado y exagerado hacia la propia persona que induce al hombre a no referir nada sino a uno mismo y a preferirse en todo. El individualismo es un sentimiento reflexivo y apacible que induce a cada ciudadano a aislarse de la masa de sus semejantes y a mantenerse aparte con su familia y sus amigos; de suerte que después de formar una pequeña sociedad para su uso particular abandona a sí misma a la grande. El egoísmo nace de un instinto ciego; el individualismo procede de un juicio erróneo, más que de un sentimiento depravado. Se origina tanto en los defectos del espíritu como en los vicios de la afectividad. El egoísmo seca la fuente de las virtudes; el individualismo al principio, sólo ciega las virtudes públicas; pero a la larga ataca y destruye todas las otras, y acaba encerrándose en el egoísmo. El egoísmo es un vicio tan viejo como el mundo, y pertenece a cualquier forma de sociedad», (A. TOCQUEVILLE, La democracia en América, II, 89). Por último, la fraternidad implica la valoración y estima de los otros y otras, en el modelo antropológico fraterno se suscita la empatía, una especie de asimiliación sentimental profunda sobre la bondad propia que recae sobre los demás; destacando que en lo fraterno no existe contraposición con respecto a los actos buenos; Es esto lo que las tendencias tan de moda, los narcisos y fraternos nos conducen hoy en día. Dan énfasis a (el fraterno) la naturaleza constructiva, creativa de nuestros lenguajes expresivos, mientras olvidan por completo (el narciso), y capta las formas extremas de la amoralidad de la por encima de la virtud , dejando de lado la creatividad histórica, a la vez que olvidan su entramado dialógico, que nos liga a los demás (CH. TAYLOR, La ética de la autenticidad, 99.).