viernes, 2 de mayo de 2014

indicadores de esclavitud moderna

Amparados en numerosas investigaciones como las que emite la Organización Internacional del Trabajo y el Global Slavery Index 2013, existen más de 28,9 millones de personas en el mundo actual trabajan como esclavos, bajo condiciones de horarios a mas de 10 horas diarias y con pocas o ninguna seguridad en la ejecución de sus labores. Según el mismo estudio se calcula que la esclavitud moderna genera más de 32000 millones de dolares para los esclavistas. El esfuerzo de muchos precursores de la libertad como: Bolívar, Lincoln, Martín Luther King, Nelson Mandela, Desmond Tutu, Todavía esta latente, su intención todavía hoy tiene vigencia. Por lo tanto, esa esclavitud esta definida como: "Se define a la esclavitud como aquel sistema en el que los seres humanos son tratados como una propiedad, en el sentido de que son vendidos y comprados por diversas partes, con el fin, casi siempre, de utilizarlos como mano de obra. Bajo este sistema, la persona que compra al esclavo es dueña de su persona de manera total, no pudiendo el esclavo ser capaz de tomar sus propias decisiones ni de protestar por cualquier situación". Lamentable aun más, viene a ser que la esclavitud misma ha mutado a diferentes formas más sutiles para poderse apoderar de muchos seres humanos aún en las sociedades más "desarrolladas", vale decir que, el autor francés Jean Francois Brient ha producido un documental en el año 2009, titulado "de la esclavitud moderna", en el mencionado documental se expresa al "totalitarismo comercial" como el principal sistema esclavizante que cruza hoy en día todas las sociedades, haciendo esclavos a millones de personas que caen en manos de un sistema económico (se vale del capitalismo así como del socialismo) que los explota y que no les da la oportunidad de vivir para sí, sino de vivir según lo ordene el sistema: compras, dinero, belleza, lujos, que va dictando el mismo sistema y que fortalece la ilusión de ser verdad cuando no lo es. Por lo menos, existen tres tipologías más de esclavitud de la cual muchos hemos sido víctimas, las podemos enumerar: 1.- la esclavitud mental:La palabra "miedo" en todos los idiomas y culturas, actualmente cruza las mentes para paralizarlas y no dejarlas actuar en el momento presente, el miedo es una creación mental que prolonga un instinto de supervivencia que dispara las alarmas para resguardar la vida; aquí el miedo se prolonga y paraliza a quienes tienen deseo de innovación social, económica, cultural, etc. El miedo es una industria que paga muy bien, ya que, se vale las armas bélicas de los grandes ejércitos del mundo para proliferar la intimidación muchas veces entre países hermanos. El miedo es una industria creciente que paga muy bien con sus películas, las tramas mortuorias dejan sin aliento a millones de personas haciéndolas creer que los tiburones son unos asesinos, que los árabes son indolentes, que las aguas se nos pueden venir encima, y toda clase de historias paralizantes. 2.- la esclavitud religiosa: una de las más feroces, porque sus grupos radicales están plenamente convencidos que pueden matar para convencer en nombre su dios o dioses. La esclavitud religiosa muchas veces conforma la totalidad de la cosmovisión de sociedades y culturas enteras, por eso se habla de la cultura judeo-cristiana, de la cultura budista, shintoista, musulmana, todas sus verdades han sido defendidas al precio de sangre. 3.- la esclavitud sexualista: desde los estudios de los países más desarrollados corren millones de películas que han embotado las mentes de sociedades enteras en cuanto a una forma de ver el sexo, tal como lo expresa la multifacética industria de la pornografía, que ha arrastrado a la ruina desde encumbrados polìticos, muchos hombres y mujeres casados, personajes religiosos. Con su proliferación, ha matado la sensualidad a costa de la practicidad, el erotismo por el fingimiento, y lo misterioso por lo banal. En resumen: La esclavitud es una posibilidad que nos espera tanto dentro como fuera de la casa, nos persigue a la hora de comer cuando nos llega una Coca Cola, nos abre la boca para dar una opinión difundida por un medio de comunicación, nos roba el dinero con necesidades ficticias, nos crea la visión de dioses falsos, nos aleja de la vida en sus términos más sencillos; alejarse de la esclavitud es una labor del día a día por medio de la conciencia del aquí y ahora. Recomendamos leer: Debord, Guy (1967). La Société du Spectacle. París: Éditions Gallimard, 1992. Eliot, T. S. (1948). Notes Towards the Definition of Culture. Londres: Faber. Gracia, Jordi (2011). El intelectual melancólico. Un panfleto. Barcelona: Anagrama.