jueves, 5 de mayo de 2016

Dios ha muerto

Quiza sea la frase mas perseguida por los Intelectuales-creyentes de occidente, la misma, la mayoria de las veces es criticada fuera de contexto...
Lo cierto es que el "loco" dijo: " Dios ha muerto. Dios sigue muerto. Y nosotros lo hemos matado. ¿Cómo podríamos reconfortarnos, los asesinos de todos los asesinos? El más santo y el más poderoso que el mundo ha poseído se ha desangrado bajo nuestros cuchillos: ¿quién limpiará esta sangre de nosotros? ¿Qué agua nos limpiará?" (Nietzche, F: La gaya ciencia, el loco: seccion 125)
Los estudiosos de Nietzsche se encargan de desgranar sus palabras, nosotros nos vamos tras las huellas de sangre derramadas por el dios muerto, el dios que ha mutado de tiempo en tiempo y que sepultado, en su momento, por la filosofia, revive por la misma inquietud sapiencial. Asi, Zeus se balancea entre lo mistico conceptual de occidente a una nueva idea sobre la divinidad que justifique la existencia  del misterio que sigue vigente.
La idea de un dios espia de lo oculto, varon, en guerra con su contraparte el diablo, sacrificador y sacrificante, parece no coincidir con los anhelos de la humanidad actual esperanzada en el misterio, aun hoy este aspecto sigue cubriendo los analisis metafisicos de los pensantes.
La idea de divinidad requiere actualizacion, ya no es necesario buscar demostrar cientificamente la existencia de dios, la divinidad desde el Intelectual se somete a aquello conocido como la Navaja de Hitchens: "lo que se afirma sin pruebas, puede ser negado sin pruebas", asi que, lo no explicable no necesita explicaciones logicas, necesita redencion valiente, necesita asimilacion actualizada. El dios de la fe, pareciera conformarse desde las huellas mistericas del orden cosmico, del eterno movimiento de las cosas, de la posibilidad que las cosas sean o no sean sin alterar lo ordenado, la vitalidad de lo que existe con respecto a la nada.
El dios del recuerdo admirable, de la honra desde la caridad, de la esperanza humana en acto, del presente como valor supremo, pareciera ascenser sobre los nuevos cielos, convirtiendo en banalidad la presuncion de pruebas, adquiriendo un nuevo valor desde  la eternidad universal ante lo temporal humano.
Muchas aspiraciones humanas llevan a la idea de iniciar un nuevo camino para creer, porque los seres humanos son creyentes y seguiran creyendo.
El loco constato que dios estaba muerto y eramos los culpables de sus asesinato, los humanos siguen creyendo admirados en la esperanza, surgen nuevos caminos.

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